En la programación de colores, el blanco del cuarzo simboliza un corazón abierto, mientras que el cuarzo claro simboliza claridad de visión y un camino aún no recorrido.
Puede ver por qué muchos practicantes de cristales ven el cuarzo como un excelente punto de partida para su ritual de curación de enfermedades extrañas y sanación espiritual.
Son fáciles de programar, abundantes, vienen en muchos colores diferentes para igualar el aura y son favorecidos por sus habilidades de amplificación de curación, especialmente cuando se agrupan en una sala dedicada a su práctica.