No descuides tu cuerpo
Mientras estás en tu camino para encontrar tu identidad espiritual, no debes olvidarte de cuidar tu mente también. La mente, el cuerpo y el espíritu no están separados, así que no olvides emplear tu cuerpo físico en tu búsqueda de la espiritualidad.
La experiencia de habitar un cuerpo es una de las experiencias espirituales más profundas disponibles para los humanos. Mover tu cuerpo puede ser una gran manera de definir tu identidad espiritual.
Esté atento a las señales
A medida que comienza a cultivar una práctica espiritual, es posible que el universo le envíe pequeños empujones o pistas para alentarlo en el camino de su buscador.
También puede comenzar a notar extrañas coincidencias o señales innegables que lo señalan más profundamente en su conexión con Dios.